Greetings to all, in this beautiful Ladies of Hive Community. Heeding the call of this contest number 215, today I return to participate. Here I share this week's invitation. Thank you @priyanarc for these great questions!
This time I will answer the first question of the contest: Do you have any Christmas memories that feel magical even now?
I have had many beautiful and magical Christmases, and many others that were not very pleasant; But this year, due to my father's absence, I remember with special fondness Christmas 1999. That year I was on my father's family's farm, which was on a mountain on the central Venezuelan coast. Although we were in the mountains, the sea was barely 5 minutes away by car, so we went daily to take a dip at the beach. The farm had a stone house that my uncle built with his own hands, and it was comfortable, even though it was in a mountainous environment.
For that trip, dad, my daughter and I went, along with one of my dogs because I couldn't leave him at home, to spend the holidays there, on my family's farm. The road was not very pleasant, since at that time the roads were collapsing due to the influx of people to various destinations in the country (the serious fuel problem in Venezuela did not yet exist); however, after about 14 hours of walking, we were able to arrive and it was a happy moment..
I clearly remember my father playing cards and dominoes with my uncles. Almost everyone was still alive, and it was very pleasant to see everyone so happy, shouting, laughing and betting. In my paternal family, playing cards, bingo and dominoes when we got together was common, even though we did not play outside of those occasions.
The other thing was the food, always abundant, always delicious. One of my aunts had prepared a large quantity of hallacas and Christmas buns, so we ate quite a bit of these delicacies. I also clearly remember that we harvested some green papayas, and we made sweets, scenting it with fig leaves. It was really beautiful.
Also the daily trips to the beach were great. I think we didn't go down either on Christmas Day or on the first day of the year 2000, because there were traffic jams on the road due to the large influx of vacationers to the beach; however, the other days we did go, and we had a great time.
Here I end my post today, where I have shared a magical Christmas, which I experienced next to my late father 24 years ago. I say goodbye to you, wishing you lots of health, prosperity and joy, and remember: Not all days are the same and more importantly: Everything you give, everything you do, will inexorably return to you. Hugs!
ESPAÑOL
Foto autoría de Travis
Saludos a todos en esta hermosa Comunidad de Ladies of Hive. Atendiendo la convocatoria de este concurso número 215, hoy vuelvo a participar. Aquí les comparto la invitación de esta semana. Gracias @priyanarc por estas estupendas preguntas!
En esta ocasión responderé la primera pregunta del concurso: ¿Tiene algún recuerdo navideño que se sienta mágico incluso ahora?
He tenido muchas Navidades hermosas y mágicas, y otras tantas no muy agradables; pero en este año, debido a la ausencia de mi padre, recuerdo con especial cariño las Navidades del año 1999. Ese año estuve en una finca de mi familia paterna, la cual quedaba en una montaña de la costa central venezolana. Si bien estábamos en la montaña, el mar nos quedaba a escasamente 5 minutos en vehículo, por lo que diariamente íbamos para darnos un chapuzón en la playa. La finca tenía una casa de piedra que construyó mi tío con sus propias manos, y era cómoda, aún cuando estaba en un ambiente montañoso.
Para ese viaje, nos fuimos papá, mi hija y yo, y uno de mis perros porque no podía dejarlo en casa, para pasar los días de festivos allá, en la finca de mi familia. El camino no fue muy agradable, ya que en ese tiempo colapsaban las carreteras por la afluencia de personas hacia diversos destinos en el país, (aún no existía el grave problema del combustible en Venezuela); sin embargo, luego de unas 14 horas de camino, pudimos llegar y fue un momento feliz.
Recuerdo claramente a mi padre jugando barajas y dominó con mis tíos. Aún casi todos estaban vivos, y era muy grato ver a todos tan felices, gritando, riendo y apostando. En mi familia paterna el jugar barajas, bingo y dominó cuando nos reuníamos, era algo común, aun cuando no jugásemos fuera de esas ocasiones.
Lo otro era la comida, siempre abundante, siempre deliciosa. Una de mis tías había preparado una gran cantidad de hallacas y bollos navideños, por lo que comimos bastante de estos manjares. También recuerdo claramente que cosechamos unas papayas verdes, e hicimos dulce, perfumándolo con hojas de higo. Fue realmente hermoso.
También las excursiones diarias a la playa fueron geniales. Creo que no bajamos ni el día de Navidad, ni el primer día del año 2000, porque había atascos en la carretera por la gran afluencia de vacacionistas a la playa; sin embargo, los otros días sí fuimos, y la pasamos muy bien.
Aquí termino mi post de hoy, en donde he compartido una Navidad mágica, que viví al lado de mi difunto padre hace ya 24 años. Me despido de ustedes, deseándoles mucha salud, prosperidad y alegría, y recuerden: No todos los días son iguales y más importante aún: Todo lo que das, todo lo que haces, inexorablemente volverá a ti. ¡Abrazos!
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