When you have the privilege of walking immersed in a bubble, oblivious to superficiality, or happy in your own dynamic, going to work can sometimes be fun and interesting.
In this, I plead guilty. Guilty of not getting tired during the 12-plus-kilometer walks I take to and from work. Guilty of not giving up despite the heat and humidity in a country where 34 degrees Celsius is normal... Guilty, yes, of smiling despite everything.
You may wonder, what does what I said have to do with the photographs I am showing you?
Ah...
Well, look how a simple glance up can change the routine of a normal workday.
Is there anything more beautiful than discovering the sun's brilliance reflected on the plants, while the clouds play with the wind, trying not to disappear?
Sometimes I wish the athletes I work with would notice the same thing. But no, they see me looking up and call me crazy.
Then I smile and say: Yes, I am a happy crazy person stuck in black and white time!
And so these photos come to you, playing with the contrast of the sun and black and white, to participate in the initiative proposed by @untilwelearn, which I hope you like.
A warm hug to everyone!
Cuando uno tiene el privilegio de caminar sumido en una burbuja, ajeno a lo superficial, o siendo feliz en su propia dinámica, acudir al trabajo puede resultar divertido e interesante en ocasiones.
En ello, me declaro culpable. Culpable de no cansarme durante las caminatas de más de 12 kilómetros que transito al ir y regresar a mi trabajo. Culpable de no rendirme a pesar del calor y la humedad en un país donde 34 grados Celsius es algo normal... Culpable, sí, de sonreír amén de todo.
Se preguntarán, ¿qué tiene que ver lo que he dicho con las fotografías que les muestro?
Ah...
Pues vean cómo una simple mirada hacia arriba puede cambiar la rutina del camino en un día normal de trabajo.
¿Hay algo más hermoso que descubrir el brillo del sol reflejado en las plantas, mientras las nubes juegan con el viento a no desaparecer?
A veces quisiera que los atletas con quienes trabajo, reparen en lo mismo. Pero no, me ven mirando hacia arriba y me dicen loco.
Entonces les sonrío y les digo: Sí, ¡soy un loco feliz colgado en el tiempo en blanco y negro!
Y así llegan a sus manos estas fotos, jugando con el contraste del sol y el blanco y negro para participar en la iniciativa propuesta por @untilwelearn, que espero os gusten.
¡Un abrazo de luz a todos!
