
Hola @drinkslovers! Feliz Navidad, ya hoy es el primer día de Diciembre 2024, y es domingo de Adviento también. Les deseo mucha salud, prosperidad, alegría, armonía y paz para todos.

Cuando un licor no viene en botella de vidrio, sino en una bolsa, como si de un jugo se tratase, hay que desconfiar, (bueno, quizás estoy siendo algo prejuiciosa y tiendo a generalizar). Esto lo comprobé ayer, cuando mi esposo compró un licor cuyo nombre es DRAGÓN. Esta bebida es muy consumida en el sitio en que vivo, razón por la cual quise probarla.

Esta presentación que les muestro en fotos, es de una bolsa de un litro de DRAGÓN. Como pueden ver, el diseño, colores y letras de la bolsa, van acorde al nombre, de allí el predominio de los colores rojo y negro, con su respectivo animal mitológico (dragón), ilustrando el empaque.



Este licor es una mezcla de ron. No es un ron propiamente, sino un derivado, algo de inferior calidad al ron. Dragón es elaborado en la Hacienda Santa Teresa, en el estado Aragua, de mi país, Venezuela, en donde se elaboran algunos de los mejores rones venezolanos, sin embargo, Dragón no presume de ser un gran ron, al menos hay honestidad en su presentación cuando podemos leer que es un blend de ron.



El precio del DRAGÓN, es de 3$ dólares americanos, quizás por ello es de consumo masivo, ya que es asequible. Había oído que las personas hacen cócteles con jugos cítricos, sodas, o simplemente lo beben seco o en las rocas. En esta ocasión yo lo acompañé con un poco de jugo de mandarina y lo serví con abundante hielo.





Pude ver que el líquido es de color claro, más tenue que el color dorado del ron tradicional, (no se aprecia esto en las fotos, porque ya había oscurecido mucho). El olor es fuerte, a licor, y con respecto al sabor… bueno, quizás o tenía unas expectativas algo elevadas, pero al dar el primer sorbo, aunque no suelo beber ron, porque me da alergia, el sabor de éste no es tan desagradable (quizás el jugo de mandarina lo hizo más amable); pero enseguida sentí que literalmente un pequeño dragón, había echado fuego en mi estómago, es un licor fuerte (30° grados de alcohol), que realmente no me agradó.


No obstante pienso que esta bebida espirituosa (tal como dice el empaque), podría ser buena para elaborar un ponche, macerar algunos frutos secos o utilizarlo en algún postre; pero en mi caso, no sería un licor que consumiría con agrado, aunque claro, esa es mi opinión personal, pues como dice el dicho “entre gustos y colores, no han escrito los autores.”

Aquí termino mi post de hoy, en el que les he compartido una reseña de una bebida, que si bien es muy popular, a mí no me gustó. Espero se animen ustedes también, a traer todas esas bebidas maravillosas y únicas de este mundo a la comunidad Amazing Drinks. Me despido deseando salud, prosperidad y alegría para todos ustedes; y recuerden: No todos los días son iguales y más importante aún: Todo lo que das, todo lo que haces, inexorablemente volverá a ti. ¡Abrazos!

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