Saludos @emiliorios, estaba escribiendo un cuento de terror, cuando vi tu post.
Sabes mi estimado, yo suelo en ocasiones reírme de mí mismo, cuando las cosas van mal, y cuando lo hago, aunque la realidad sea bastante funesta, termino mirándola con otros ojos y viendo caminos para salir de las situaciones, y en el peor caso, aceptando la realidad, pero con el firme convencimiento, de poder mejorar la situación.
Ya que cómo dice Santa Teresa de Ávila, “Todo pasa y solo Dios basta”.
Por otro lado, cuando me dejo llevar por las situaciones y entro y vibro en su ritmo de malestar, preocupación, molestia y desagrado, termino en condiciones de cansancio general y normalmente lamentándome, ya que siempre, hace uno pagar a un tercero las frustraciones que posee, lo que termina llevándome al arrepentimiento y al malestar espiritual.
Y eso me pasa, cuando me olvido de que la risa y la alegría son el alimento del alma, y si uno cree en la espiritualidad, no en la religión, sino en la espiritualidad y lo que ella conlleva, uno consigue en la vida grandes experiencias, que demuestran que la risa y la alegría, son las bases de un camino apacible, pacífico y rodeado de las sombras que se generan de los grandes amigos que uno va sembrando en el camino de la vida.
Por eso es importante leer a Job. Sabes que ese es uno de los libros más hermosos y significativos de la Biblia, tiene una enseñanza brutal y justo en (Job 8:21). Nos conseguimos con este versículo que reafirma mucho de los que planteas en tu post :
- No, Dios no rechaza al íntegro, ni da la mano a los malvados.
- La risa ha de llenar aún tu boca y tus labios, el clamor de júbilo.
- Tus enemigos serán cubiertos de vergüenza, y desaparecerá la tienda de los malos.
Ojo, en espiritualidad y su estudio profundo, no se toman las frases literalmente, ya que al igual que la Cábala es interpretativa, es decir, en este punto, cuando se habla de enemigos y malvados, no se habla de terceros, sino de tus verdaderos enemigos, nuestro ego, nuestra mente atorrante, nuestras posiciones excluyentes, entre otras cosas.
Sin embargo; aun tomándolo de manera directa, también deja de entrada a otras enseñanzas, y finalmente termino con una parte del Salmo: 126 que dice en sus versículos 1 y 2: “Canción de las subidas. Cuando Yahveh hizo volver a los cautivos de Sión, como soñando nos quedamos; - Entonces se llenó de risa nuestra boca y nuestros labios de gritos de alegría. Entonces se decía entre las naciones: ¡Grandes cosas ha hecho Yahveh con éstos!”
Entendiendo que la traducción está mal hecha, ya que el nombre,Yahveh, Jehova, Yagüe, o como lo quieran llamar, no es, ni se parece al nombre de Dios.
De hecho, el tetragrama hebraico (יהוה) no es un nombre, tampoco significa “Yo soy el que soy” la traducción más parecida es "Seré el qué Seré".
El tetagrama, Es más bien una atribución de Dios, de hecho en el l llamado Libro de los números de la Biblia, nombre mal traducido, ya que en la Torá Hebrea, es o se puede traducir, como “El Libro del Desierto o el Libro de Nombres” es el libro donde están los llamados nombres de Dios, que son 72, y esos nombres son las 72 atribuciones que posee Dios ante los hombres y la forma en que se manifiesta ante ellos, o mejor dicho a nosotros.
Pero ya me alejé del tema principal.
Para terminar y tomar de nuevo lo que dije al principio, la risa y la alegría son al alimento del alma, y por eso es importante, estar alegres y mantener el buen humor, debido, a que en espiritualidad, eso se ve como mantener la FE, entendiendo la fe, como la fuerza espiritual, que nos une al creador y nos da claridad en la vida.
PD. Como dato curioso, Los Salmos de David, al inicio, empiezan con la expresión “Al Director de la orquesta”; Refiriéndose con ese cargo al Eterno, a Dios, aquel que da la luz y la alegría, a quienes lo escuchan o tienen cerca. Puedes leer una traducción más correcta de los salmos y de la Torá en la Biblia de Jerusalén.
Excelente post.
!ALIVE