Qué experiencia tan hermosa, me los imagino y debe haber sido impactante todo el aprendizaje obtenido. Quienes podemos ver nos cuesta ponernos en el lugar de quien ha perdido este sentido; pienso que al haber ellos agudizado su oído a partir de lo que han vivido, reconocen más rápido sonidos de aves que quizá quienes ven no lo han hecho. Qué bueno que se den estás actividades.
Saludos cordiales.