Hola amigos
Un abrazo grande para todos. Hoy estoy de nuevo con ustedes para contar las maravillas que se hacen con y por nuestros niños.
Hoy mi David no fue a la escuela porque tenía que hacerse un chequeo de rutina para analizar su sistema inmune, ya que ha tenido problemas anteriormente.
Luego de salir del laboratorio nos fuimos hasta mi trabajo, porque por programación correspondía el taller de artes plásticas con niños autistas.
En lo que les cuento les voy mostrando las fotos. Hoy no fueron muchos niños, porque ya estamos casi terminando las clases y algunos están en exámenes, otros están enfermos, pero hoy justamente David pudo asistir por primera vez.
Jugaron muchísimo, trabajaron con plastilina y acuarela. Gretchen es la vicepresidenta de la Fundación y a la vez es artista de la plástica e instructora de la misma manifestación.
David pudo hacer cuanto quiso con los materiales que se le dieron para trabajar, primero hizo un paisaje marino y luego con plastilina lo realizó en 3D como mismo él expresó.
Luego me contó que se había sentido muy bien, porque había sido él mismo, como quería ser sin que nadie lo mirara mal o se burlaran.
Aunque solo habían cuatro niños, todos estaban bien representados con sus padres, mi David también llevó a su mascota, el Morrocoy, que eso fue un punto de atención en un momento del taller.
Gretchen les habló del cuidado de las mascotas y lo que no les puede faltar. También que cuando terminan de jugar con ellas hay que lavarse bien las manos.
Con nosotros estaban hoy una Iris Hernández y Rey, periodista y fotógrafo del periódico 26, de nuestra Ciudad de Las Tunas.
Ellos también disfrutaron de las maravillas que hacen nuestros niños cuando se reúnen, cuando tienen un sitio en común y son amados como son sin importar etiquetas ni condición.
Cada niño fue escuchado por su profesora, ella les atiende con mucha ternura y les enseña como combinar colores.
Hoy también les mostró como amarrar los cordones de los zapatos, en unas sesiones del taller seguirá profundizando esta tarea. Porque todos lo necesitan y ella es consciente de ello.
Cada uno es diferente, con sus características personales pero todos son muy amorosos y creativos. Yo también disfruté mucho el taller.
Me encantó que mi niño se sintiera bien. Lo vi feliz. Cuando regresamos a la casa era un niño nuevo, era un niño que había disfrutado la mañana sin nadie que lo molestara o se burlara de él.
Sin dudas Laberinto de luces le hacía falta a esta ciudad. Le hacía falta a nuestros niños. Necesitamos más Laberinto de luces en el mundo.
El texto publicado es original y las imágenes son de mi propiedad.
ENGLISH VERSION
Hello friends
A big hug to everyone. Today I'm back with you to tell you about the wonders being done with and for our children.
Today my David didn't go to school because he had to have a routine checkup to analyze his immune system, as he's had problems in the past.
After leaving the lab, we headed to my work because the schedule was right for the fine arts workshop with autistic children.
As I tell you, I'll show you the photos. Not many children came today because we're almost done with school and some are taking exams, others are sick, but today David was able to attend for the first time.
They played a lot, working with clay and watercolors. Gretchen is the vice president of the Foundation and is also a visual artist and instructor of the same discipline.
David was able to do whatever he wanted with the materials he was given to work with. First, he made a seascape, and then, using clay, he made it into a 3D modeling clay, just as he expressed it.
He later told me that he felt great because he had been himself, the way he wanted to be, without anyone looking down on him or making fun of him.
Although there were only four children, they were all well represented with their parents. My David also brought his pet, Morrocoy, which was a focus at one point during the workshop.
Gretchen talked to them about pet care and what they shouldn't be without. She also told them to wash their hands thoroughly when they're done playing with them.
With us today were Iris Hernández and Rey, a journalist and photographer from newspaper 26, from our city of Las Tunas.
They also enjoyed the wonders our children do when they come together, when they have a common place and are loved as they are, regardless of labels or conditions.
Each child was listened to by their teacher. She attended to them with great tenderness and taught them how to combine colors.
Today she also showed them how to tie shoelaces. In later workshop sessions, she will continue to explore this skill in more depth. Because they all need it, and she is aware of this.
Each one is different, with their own personal characteristics, but they are all very loving and creative. I also really enjoyed the workshop.
I loved that my boy felt good. I saw him happy. When we returned home, he was a new boy, a boy who had enjoyed the morning without anyone bothering or making fun of him.
There's no doubt this city needed Labyrinth of Lights. Our children needed it. We need more Labyrinth of Lights in the world.
The published text is original and the images are my property.
