¡Hola, @osomar357 ! A modo personal, creo que el debate puede dar entrada a nuevas ideas e incluso reforzarlas. Sin embargo, creo que también es importante tener en cuenta a la persona con quien dialogas; en algunos temas en particular (sobre todo religión y política), la gente está tan enraizada con su modo de pensar que las nuevas ideas o les horrorizan, o no les dan la debida importancia, o intentan imponerte sus ideas. Pero bueno, cada cabeza es un mundo. ¡Saludos y que tengas un bonito día!
Hola @vickaboleyn, feliz día.
El problema en el punto que planteas, tiene que ver con la actitud de la gente, y sí, es muy difícil discutir con fanáticos. Y digo fanáticos, ya que eso es lo que son los que se basan en los extremos. Y de hecho, la mayoría de esas personas no saben pensar, y a eso se le debe sumar, que son sumamente ignorantes. Y basan su razonamiento en la creencia y la ideología, y no la formación.
Yo milité en una agrupación política casi 25 años, y ahí, siempre hubo procesos de formación y discusión, no solo entre los miembros, sino con partidos de diferente posición política. Y sí, en las diferentes agrupaciones había personas con las que podías hablar y dialogar, y también estaban los fanáticos, llenos de odios y limitaciones, emocionales, intelectuales y afectivas.
En fin, hay que saber con quien se discute, ya que no se puede perder el tiempo, con gente con la que no se puede hablar.
Pero, cuando las discusiones son amplias, y los argumentos sólidos, los fanáticos, quedan relegados muchas veces ante las fuerza de los argumentos, y ahí está el arte, de ganarse a las mayorías con el discurso y las posiciones en una discusión.
Una situación es perder el tiempo, discutiendo con fanáticos e ignorantes, en modo personal, yo personalmente no hago eso.
Otra, es poder discutir y dialogar, con personas que piensan diferente a uno, y tienen posiciones diferentes, pero con las que puedes dialogar, aprender y hasta hacer cosas juntos a nivel personal.
Y otra, es ganar en posiciones en discusiones colectivas.
Pero siempre, hay que defender la opción de discutir, y siempre hay que revelarse ante las imposiciones de los fanáticos.
Yo siempre lucharé por la amplia discusión y el consenso, en las conversaciones y en la vida.
Feliz tarde