Mientras te leía me veía a mí misma con mis carpetas de papeles de los que no quería desprenderme. Ahora en mi teléfono me avisan los correos electrónicos que ya no tengo espacio para más y me cuesta borrar fotografías, audios o videos que sé que no necesito; pero que sí llegara a deshacerme de ellos, algo me dice que sí los necesitaré, como algunos que borré y me lamento. Así somos, no sé si sea apego precisamente.
Saludos cordiales.