La Abundancia Me Encuentra Trabajando [Also in English]

in Holos&Lotus2 days ago
2.jpg
Imagen de fondo, cortesía de Elementos de CANVA

Desde niño supe que, si quería algo, tenía que trabajar por ello. En casa, eso no se discutía, era parte del aire que respirábamos. Papá lo mostró con hechos. A los doce años ya estaba metido en el negocio, aprendiendo todo, entendiendo que el dinero no llega por arte de magia, sino que se hacía con ganas.

Siempre disfruté de trabajar. Me encanta ganar dinero. Me hace sentir vivo. No por ambición desmedida, sino porque el dinero es energía; es la manera práctica que tengo de intercambiar valor con el mundo.

Pero hubo una ruptura, donde nada importaba y esto hizo que el dinero se distanciara. No por falta de talento ni de herramientas. Fue una crisis de ansiedad, una búsqueda desesperada por encontrar respuestas sobre mí, sobre quién era realmente. En ese proceso de buscarme, me perdí. Y en esa pérdida, también se esfumó mi abundancia.

Recuerdo que el dinero no fluía. Ni siquiera tenía un empleo, mi mente estaba atrapada en la escasez de identidad dando como consecuencia que todo lo demás desapareciera, hasta el billete en el bolsillo.

Fue allí donde reflexioné y cuestione si la felicidad era tener dinero en la cuenta o tener paz con lo que uno hace, tener conexión con lo que uno crea, saber que el valor no solo se mide en cifras.

Hoy puedo decir que la abundancia, para mí, comienza por dentro. Pero ojo, no reniego del dinero, al contrario: lo honro, lo quiero. No me avergüenza decirlo. Lo que cambió es que ahora lo veo como un reflejo de mi equilibrio interno, no como un parche para tapar vacíos.

Aprendí que puedo crear desde donde estoy. Que CANVA, por ejemplo, se convirtió en una herramienta poderosa para mí. No soy diseñador gráfico, pero aprendí lo suficiente como para hacer diseños que comunican, que venden. Y eso también es abundancia: tener acceso a herramientas, saber usarlas, y ofrecer algo que puede ayudar a otros. Allí también entra HIVE. La blockchain despertó en mí, dones escondidos, se transformó en condimento para mi felicidad porque hizo emerger al contador de historias que se había quedado atrapado en la niñez.

Y sí, me sigue gustando trabajar. Me entusiasma levantarme con una idea y convertirla en acción. Me emociona ayudar a otros con lo que sé, compartir lo que voy descubriendo, y ojalá inspirar a alguien.

Porque la verdad es que no importa cuántas veces te caigas, mientras no te declares pobre de espíritu. Mientras sepas que puedes reinventarte. Que puedes volver a generar. A vivir con propósito.

No recuerdo que mis padres dijeran que éramos pobres. Ni siquiera cuando había que estirar el dinero. Y eso que éramos seis muchachos que devorábamos todo. No tener dinero es muy distinto a asumir la identidad de pobre. Eso nunca estuvo en nuestro vocabulario, eso no se concibe.

Ahora miro hacia atrás y me doy cuenta de que mi mayor riqueza ha sido siempre la mentalidad con la que fui criado. Una mentalidad de no quedarme cruzado de brazos esperando que la vida me dé. Si quiero algo, voy por ello. Y si no sé cómo, aprendo.

Hoy mi definición de abundancia incluye dinero, claro que sí. Pero también incluye salud mental. He pasado momentos difíciles, sí. He estado sin plata, también. Pero pobre, nunca. Porque incluso en mi peor momento, supe que eso también pasaría. Y pasó.

Porque cuando entendemos que la verdadera riqueza comienza con cómo nos sentimos, todo empieza a cambiar. Y desde ahí, el dinero, cuando llegue, será solo una consecuencia, no una necesidad.

Por último, no puedo irme sin decir una de las mías: pobre es el flojo, y hay muchos flojos en esta vida.

Gracias por leerme, por ser parte de mi abundancia.

Todos los Derechos Reservados. © Copyright 2021-2025 Germán Andrade G.

Contenido original, escrito para:
Mi relación con la abundancia por @damarysvibra.

Todas las imágenes fueron editadas usando CANVA Pro.

Es mi responsabilidad compartir con ustedes que, como hispanohablante, he tenido que recurrir al traductor Deepl para poder llevar mi contenido original en español al idioma inglés. También, hago constar que he utilizado la herramienta de revisión gramatical Grammarly.

Caracas, 2 de mayo del 2025

English

3.jpg
Background image, courtesy of CANVA Elements

Since I was a child, I knew I had to work for something if I wanted something. That wasn’t up for debate at home—it was part of the air we breathed. My dad showed it through action. By the time I was twelve, I was already involved in the family business, learning everything, understanding that money doesn’t come by magic—it’s made with effort.

I’ve always enjoyed working. I love earning money. It makes me feel alive. Not out of greed, but because money is energy; it’s a practical way to exchange value with the world.

But then came a break. A time when nothing seemed to matter—and with that, money drifted away. Not because I lacked talent or tools. It was a crisis of anxiety, a desperate search to find answers about myself, about who I was. And in that search, I got lost. And with that loss, my abundance vanished too.

I remember how money stopped flowing. I didn’t even have a job, and my mind was stuck in an identity crisis that dragged everything else down, including the cash in my pocket.

That’s when I started to reflect and question: Is happiness about having money in your account, or is it about finding peace with what you do, having a connection with what you create, and knowing that value isn’t only measured in numbers?

Today, I can say that abundance, for me, starts from within. But let’s be clear: I don’t reject money—on the contrary, I honor it, I like it. I’m not ashamed to say it. What’s changed is that now I see money as a reflection of my internal balance, not as a patch to cover my wounds.

I’ve learned I can create from wherever I am. Tools like CANVA became powerful allies. I’m not a graphic designer, but I’ve learned enough to create designs that communicate, that sell. And that, too, is abundance: having access to tools, knowing how to use them, and offering something valuable to others.

Then came HIVE. The blockchain awakened hidden talents in me. It became the spice that added flavor to my happiness. It brought back the storyteller who had been stuck in childhood.

And yes, I still love working. It excites me to wake up with an idea and turn it into action. It moves me to help others with what I know, to share what I discover, and maybe inspire someone along the way.

Because the truth is, it doesn’t matter how many times you fall, as long as you don’t declare yourself poor in spirit. As long as you know, you can reinvent yourself. That you can generate again. That you can live with purpose.

I don’t remember my parents ever saying we were poor. Not even when money was tight. And we were six kids, eating everything in sight. Not having money is very different from identifying as poor. That was never part of our vocabulary. That mindset simply didn’t exist.

Looking back, I now realize that my greatest wealth has always been the mindset I was raised with. A mindset that refuses to sit back and wait for life to hand me things. If I want something, I go after it. And if I don’t know how, I learn.

Today, my definition of abundance includes money. But it also includes mental health. I’ve been through tough times, yes. I’ve been broke, too. But poor? Never. Because even in my darkest moments, I knew that this, too, shall pass. And it did.

Because when we understand that real wealth begins with how we feel, everything starts to shift. And from that space, money, when it comes, will be a result, not a crutch.

Lastly, let me leave you with one of my favorite sayings:
Poor is the lazy one—and there are plenty of those out there.

Thank you for reading me, for being part of my abundance.

All rights reserved. © Copyright 2021-2025 Germán Andrade G.

The original content was written for:
My relationship with abundance by @damarysvibra.

All images were edited using CANVA Pro.

Caracas, May 2, 2025

It is my responsibility to share with you that, as a Spanish speaker, I have had to resort to the translator Deepl to translate my original Spanish content into English. I also state that I have used the grammar-checking tool Grammarly.

Stickers Varios.jpg

Sort:  

La abundancia no siempre es tangible, como tener dinero y otros lujos, también lo encontramos en lo intangible, como bien has dicho, un ejemplo de ello, salud mental. Saludos.

@hylene74, gracias por tu amable visita y comentario.

Me identifico contigo en cuanto a que el dinero se debe hacer porque no llega por arte de magia, de acuerdo contigo, pobre es quien se deja llevar por la pereza, me encantó tu escrito que como siempre está cargado de ese buen humor, un gran abrazo mi querido amigo @germanandradeg,
!LADY
!PIZZA


View or trade LOH tokens.


@cautiva-30, you successfully shared 0.1000 LOH with @germanandradeg and you earned 0.1000 LOH as tips. (1/12 calls)

Use !LADY command to share LOH! More details available in this post.

Gracias, linda Mariela (@cautiva-30), tu visita siempre es como la brisa de mar que me roba sonrisa. Mi cariño incondicional y abundante para ti.

Sentirse afortunado es el primer paso para serlo, así que bendiciones en la afluencia de tu prosperidad. Excelente que te guste el diseño y crear.
Saludos y más éxitos.

Luisa (@slwzl), mil gracias por tu amable visita y comentario.
Cariños desde este lado del planeta.

La energìa del dinero, es importante mirarlo de esa forma.

Saludos

Gracias, linda Mercedes (@mercmarg) por tu amable comentario.

Muy interesante su reflexión, a mi también HIVE me ha servido de mucho, pero en el caso de CANVA no he logrado editar, necesito asesoría. Le deseo un feliz fin de semana.

Hola amigo Félix (@felpach). Agradecido por tu visita.
Estoy a tus órdenes para aclarar dudas sobre CANVA. No es que sea un gurú, pero sí me defiendo.
Puedes contactarme por:

  • En Discord por el DM y servidor de Ecency: canal en Español
  • Waves (Ecency)
  • En la red social de la web 2 "X" (antes Twitter): germanweb3, por un DM.

Salud, paz y abundancia estimado autor, o como dice la canción: Salud, dinero y amor.
Buena fortuna en todas tus empresas.

¡Gracias, mi hermanazo!

Ser pobre de espíritu debe ser la peor desventura que pueda pasar alguien. Se puede estar sin dinero pero de allí a ser pobre hay mucho trecho. Saludos cordiales.

Así es estimada @charjaim. Saludos desde este lado del planeta.

PIZZA!

$PIZZA slices delivered:
@cautiva-30(3/10) tipped @germanandradeg

Come get MOONed!

Gran reseña muy completa y muy real. suerte en tus proyectos @germanandradeg

Muy precisa reflexión que seguramente motivará a muchos a replantearse conceptos preconcebidos.
¡Felicitaciones por esta manera de enfrentar la vida!