Hello everyone.
Yesterday I was talking with my friends from Alta Literatura about the projects we're working on, and, being self-critical, we're procrastinating way too much. This is a real problem that's holding us back, and that's why I want to talk about a simple, hard truth: the time to do things is now.
The phrase "don't put off until tomorrow what you can do today" may sound like a cliché, but it contains a truth we all know. Every time we postpone a task, we not only leave it pending, but we also add the mental burden of having to remember it and the anxiety of knowing it's there, unresolved.
That mental load is unnecessary and exhausting. Doing it today means releasing that pressure immediately.
Therefore, if every time we decide something today, we leave it for tomorrow or later, we'll never get anything done.
Procrastination is a cycle. A "I'll do it tomorrow" easily turns into a week, then a month, and finally an abandoned project.
And we don't want that.
The only way to break this cycle is with immediate action. The decision must be followed by movement, without any room for doubt that allows for excuses.
Furthermore, the longer we delay doing things, the more opportunities we will miss. The world doesn't stop.
A fresh idea can become obsolete, a job opening can close, a valuable connection can cool.
The time we waste hesitating is time others spend moving forward and circumstances change.
That's why I'm convinced the best time to do something is now. Not when we have "more time," not when we feel "100% ready," because that perfect moment almost never arrives.
Now is the only time we have real control over. Starting now, even with a small step, is what transforms an idea into a result. It's the difference between those who only dream and those who achieve their goals.
Leer en español
Hola, estimados.
Ayer estaba conversando con mis amigos de Alta Literatura sobre los proyectos en que estamos inmersos y, siendo autocríticos, estamos procrastinando demasiado. Este es un problema real que nos frena, y por eso quiero hablar sobre una verdad simple, dura y : el momento de hacer las cosas es ahora.
La frase "no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy" puede sonar a cliché, pero encierra una verdad que todos conocemos.
Cada vez que posponemos una tarea, no solo la dejamos pendiente, sino que le añadimos el peso mental de tener que recordarla y la ansiedad de saber que está ahí, sin resolver.
Esa carga mental es innecesaria y agotadora. Hacerlo hoy significa liberar esa presión de inmediato.
Por tanto, si cada vez que decidimos algo hoy, lo dejamos para mañana o para después, nunca haremos nada.
La procrastinación es un ciclo. Un "lo haré mañana" se convierte fácilmente en una semana, luego en un mes, y finalmente en un proyecto abandonado.
Y nosotros no queremos eso.
La única manera de romper este ciclo es con la acción inmediata. La decisión debe ir seguida del movimiento, sin un espacio de duda que permita la excusa.
Además, mientras más nos demoremos en hacer las cosas, seguiremos perdiendo oportunidades. El mundo no se detiene.
Una idea fresca puede volverse obsoleta, una vacante de trabajo puede cerrarse, una conexión valiosa puede enfriarse.
El tiempo que perdemos dudando es tiempo en el que otros avanzan y las circunstancias cambian.
Por eso, estoy convencida de que el mejor momento de hacer algo es ahora. No cuando tengamos "más tiempo", no cuando nos sintamos "100% preparados", porque ese momento perfecto casi nunca llega.
Ahora es el único momento sobre el que tenemos control real. Empezar ahora, aunque sea con un paso pequeño, es lo que transforma una idea en un resultado.
Es la diferencia entre quienes solo sueñan y quienes logran sus objetivos.





