When I was little my father used to make me a delicious juice. He made it thick and told me it was a compote, natural and made with love. After a few minutes I would drink it all of it, because its sweet flavor caressed my palate. The protagonist of this recipe was the parchita, both its pulp and its shell, which has many nutrients. That's why, at home, we never throw it away in the trash.
Ingredients:
- 4 parchitas (maracuyá)
- 1/2 papelón
- 2 liters of water (4 glasses)
Procedure:
- The papelón is divided into small pieces and placed in a container with two cups of water. Let it stand for 40 minutes or until it dissolves.
Chop the parchitas and extract the pulp and blend it with a little water. Once this part is ready, it is strained.
Boil the shells in a pot until they reach a soft texture. Then, let it cool down.
With a spoon, remove the soft part of the shells, leaving a thin layer. This procedure is done so that it is easier to strain it and there is no excess of bagazo (fruit residues).
The papelón is strained to eliminate impurities. This liquid is used to liquefy the shells. Subsequently, it is strained.
Finally, the two parts are put together in a pitcher. At this point it is tasted to check the sweetness, it is adjusted to the taste of each person.
The acidity of the parchita is diminished by its shell and, in turn, combines very well with the flavor of the papelón. The result was a refreshing juice that the whole family loved, including my father, who was delighted with this preparation.
Cuando estaba pequeña mi padre solía prepararme un jugo delicioso. Él me lo hacía espeso y me decía que era una compota, natural y realizada con mucho cariño. A los pocos minutos me la tomaba completa, pues su dulce sabor acariciaba mi paladar. La protagonista de esta receta era la parchita, tanto su pulpa como su concha, la cual tiene muchos nutrientes. Por eso, en casa, nunca la desechamos en la basura.
Ingredientes:
- 4 parchitas (maracuyá)
- 1/2 papelón
- 2 litros de agua (4 vasos)
Procedimiento:
- El papelón se divide en trozos pequeños y se coloca en un envase con dos tazas de agua. Se deja reposar por 40 minutos o hasta que se disuelva.
Se pican las parchitas y se extrae la pulpa para licuarla con un poco de agua. Lista esta parte se procede a colarla.
En una olla se ponen las conchas a hervir, hasta lograr una textura blanda. Luego, se deja enfriar.
Con una cuchara se extrae la zona blanda de las conchas, dejando una capa leve. Este procedimiento se realiza para que sea más sencillo colarlo y no quede exceso de bagazo (residuos de fruta).
El papelón se cuela para eliminar las impurezas. Este líquido se utiliza para licuar las conchas. Posteriormente, se cuela.
Finalmente, se unen las dos partes en una jarra. En este punto se prueba para comprobar el dulzor, se ajusta al gusto de cada persona.
La acidez de la parchita se ve disminuida por su concha y, a su vez, combina muy bien con el sabor del papelón. El resultado fue un jugo refrescante que le encantó a toda la familia, incluído mi padre, quien se deleitó con esta preparación.
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✓ Fotos propias, editadas con la aplicación Foto Collage.
✓Texto traducido con DeepL.
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