Hello my dear friends, today I am pleased to share with you a walk that we made through the historic center of Old Havana, whenever we have the opportunity we go for a walk through this area because there are many places to know and admire its colonial architectural beauty, this whole area is like a large open-air museum.
The main objective was to go to the Chocolate Museum, those who know me know that I am a super lover of this delicious delicacy and I always have an excuse to taste it in any of its variants.
We were walking along Mercaderes street because it is a very interesting street, it is for pedestrian traffic and it is beautifully cobbled, its current splendor is thanks to the restoration work carried out by the office of the City Historian under the direction of the always remembered and beloved Dr. Eusebio Leal Spengler.
Its name (Merchants in English) is due to the fact that in colonial times this street had many shops where all kinds of products that came from overseas were sold, since this is the closest area to the entrance of the ships to the bay.
Right at the intersection of Mercaderes and Amargura streets is the Chocolate Museum, but before entering I took photos of this corner to tell you something very interesting.
This house is also called the house of the Green Cross, due to that beautiful cross or double unequal cross of wood, green in color that is supported on a stone pedestal.
In the past, in the seventeenth century and until the middle of the nineteenth century, Catholics celebrated Holy Week with a Stations of the Cross that took place along Amargura Street from the Convent of San Francisco de Asís to the Church of Holy Christ of the Good Journey.
At the corners of the entire route there were crosses where the procession stopped, prayed and left offerings. One of these crosses is the one that we can still see at this intersection thanks to the restoration of the entire building in 2003.
This building was always intended for shops of different types and on the upper floor is residences. From 2003 the lower floor was dedicated to the Casa del Chocolate Museum.
We finally went in to enjoy artisanal chocolate. The place is very busy; it is always like this because many people like chocolate. From the entrance we are invaded by the delicious aroma, it is a small place, with shelves that show different utensils for its preparation, molds to make the different presentations of chocolate and collections of cups for serving and drinking chocolate. There are also posters about the start of its production and its nutritional properties.
Separated by a glass we can see how a worker makes the chocolate that we will consume, at this time he was preparing the so-called tobaccos.
I ordered a cup of hot chocolate and my husband ordered a cold smoothie, we both accompanied them with buttered toast, we also ordered chocolate tobaccos of course. Everything was delicious!
It is my wish that you have enjoyed learning about the history of this street and the Chocolate Museum of Old Havana. I enjoyed sharing it with you.
See you soon!
VERSIÓN EN ESPAÑOL
Museo del Chocolate, mezcla de historia y sabor
Hola mis queridos amigos, hoy me complace compartir con ustedes un paseo que realizamos por el centro histórico de La Habana Vieja, siempre que tenemos la oportunidad vamos de paseo por esta zona porque hay muchos lugares para conocer y admirar su belleza arquitectónica colonial, toda esta zona es como un gran museo al aire libre.
El objetivo principal era ir al Museo Casa del Chocolate, los que me conocen saben que soy súper amante de este delicioso manjar y siempre tengo una excusa para saborearlo en cualquiera de sus variantes.
Estuvimos caminando por la calle Mercaderes porque es una calle muy interesante, es de tránsito peatonal y está bellamente adoquinada, su esplendor actual es gracias al trabajo de restauración que realizó la oficina del Historiador de la Ciudad bajo la dirección del siempre recordado y querido Dr. Eusebio Leal Spengler.
Su nombre se debe a que en la época colonial esta calle tenía muchos comercios donde se vendían todo tipo de productos que venían de ultramar, ya que esta es la zona más cercana de la entrada de los barcos a la bahía.
Justo en la intersección de las calles Mercaderes y Amargura se encuentra el Museo Casa del Chocolate, pero antes de entrar le tomé fotos a esta esquina para comentarles algo muy interesante.
A esta casa también se le llama la casa de la Cruz Verde, debido a esa hermosa cruz o doble cruz desigual de madera, de color verde que se encuentra apoyada en un pedestal de piedra.
Antiguamente por el siglo XVII y hasta mediados del XIX los católicos celebraban la Semana Santa con un Vía Crucis que se realizaba por toda la calle Amargura desde Convento de San Francisco de Asís hasta la Iglesia del Santo Cristo del Buen Viaje. En las esquinas de todo el trayecto había cruces donde la procesión se detenía, rezaba y dejaba ofrendas. Una de estas cruces es la que aún podemos apreciar en esta intersección gracias a la restauración de toda la edificación en el año 2003.
Este edificio siempre fue destinado a comercios de diferentes tipos y en la planta superior es de residencias. A partir del 2003 la planta inferior se dedicó al Museo Casa del Chocolate.
Al fin entramos a disfrutar del chocolate artesanal. El local está muy concurrido, siempre es así porque el chocolate les gusta a muchas personas. Desde la entrada nos invade el delicioso aroma, es un lugar pequeño, con estanterías que muestran diferentes utensilios para su elaboración, moldes para hacer las diferentes presentaciones de chocolate y colecciones de tazas para servir y tomarlo. También hay carteles sobre el inicio de su producción y sus propiedades nutritivas.
Separado por un cristal podemos ver como un trabajador elabora el chocolate que consumiremos, en este momento estaba preparando los llamados tabacos.
Yo pedí una taza de chocolate caliente y mi esposo pidió un batido frío, ambos los acompañamos con tostadas con mantequilla, también pedimos tabacos de chocolate por supuesto. ¡Todo estuvo delicioso!
Es mi deseo que les haya gustado conocer la historia de esta calle y el museo del Chocolate de La Habana Vieja yo disfrute compartiéndolo con ustedes.
¡Hasta pronto!
Historical data were consulted on this site.