English version
In the kitchen, much of what happens is through experimentation, while other times magic happens by mere chance. Once, without realizing it, I mixed wheat flour and corn flour, and the result was a sensational arepa. For this reason, I keep an open mind when cooking in case I discover a special formula.
Intuition and common sense often guide me when what I have on hand doesn't seem to go together. I also admit that watching my parents and grandmother in the kitchen has shown me the way forward, so I usually start with the basics and then experiment with adding flavor and texture.
In this case, my starting point is pumpkin, which is very versatile and has a neutral flavor. It can be used to make soup and also cakes, which gives you an idea of the variety of recipes that have this ingredient as their main ingredient. Since I had pumpkin, chicken, and carrots available that day, I decided to make a cream soup for little Alma.
Ingredients:
- 6 chili peppers
- 1 carrot
- 1 onion
- 1/2 chicken breast
- Salt to taste
- Oil
- Water
Preparation:
I washed the squash and carrots, then peeled them. I removed the seeds and impurities from the squash and diced it, while I sliced the carrots.
I placed the pieces in a pot with water to boil, adding a pinch of salt.
Similarly, I placed the chicken breast in another pot, also with water and salt, and covered it so that the steam would help cook it.
After washing and removing the seeds from the 6 chili peppers, I chopped them into small pieces, and also diced the onion. I sautéed the seasonings with a little oil over low heat, turned off the heat when they were soft, and set them aside.
With the help of a fork, I checked that the pumpkin pieces were ready for the cream and waited for them to cool.
Next, I pierced the chicken breast and made sure it was ready to eat. Then, I removed it from the heat. After a few minutes, I shredded it into thin strips. I saved the chicken broth.
The pumpkin pieces went into the blender along with a cup of chicken broth and the seasonings. I blended until I got a smooth mixture. Finally, I added half of the carrot slices and some strips of chicken and blended again.
The cream had an incredible color, not only because of the yellow of the squash, but also because the carrots accentuated the hue. Then I decided to add the rest of the chicken breast and used the remaining carrot slices to garnish.
This recipe was a hit; my little bee was happy after every bite. She loves chicken and carrots, so having these two ingredients in the cream made it the perfect addition to delight her palate.
Versión en Español
En la cocina, mucho de lo que sucede es por experimentación, en otras ocasiones la magia sucede por mera casualidad. Una vez mezclé, sin darme cuenta, harina de trigo y de maíz, el resultado fue una arepa sensacional. Por tal razón, mantengo la mente abierta a la hora de cocinar por si acaso descubro una fórmula especial.
La intuición y el sentido común, muchas veces, me guían cuando lo que tengo a mano no parece combinar. Admito, además, que la observación a mis padres y a mi abuela en la cocina me han mostrado el camino a seguir, así que suelo partir de lo básico para luego experimentar en lo que respecta añadir sabor y texturas.
En este caso, mi punto de inicio es una auyama, la cual es muy versátil y posee un sabor neutro. Con ella se puede hacer sopa y también tortas, lo que concede una idea de la variedad de recetas que tienen este ingrediente como principal. Ya que en este día tenía a mi disposición auyama, pollo y zanahoria, decidí preparar una crema para la pequeña Alma.
Ingredientes:
- 6 ajíes
- 1 zanahoria
- 1 cebolla
- 1/2 pechuga de pollo
- Sal al gusto
- Aceite
- Agua
Preparación:
Lavé la auyama y la zanahoria, procedí a retirarles las conchas. A la primera le quité tanto las semillas como las impurezas y piqué en cuadritos, en tanto a la segunda la dividí en rodajas.
Coloqué los pedazos en una olla con agua para sancochar junto a un punto de sal.
De igual forma, en otra olla introduje la pechuga de pollo, también con agua y sal, y la tapé para que el vapor contribuyera a cocinar.
Tras lavar y retirar las semillas a los 6 ajíes, procedí a picarlos en pedazos pequeños, también la cebolla fue dividida en cuadritos. Sofreí los aliños con un poco de aceite a fuego bajo, apagué cuando estuvieron blandos y reservé.
Con la ayuda de un tenedor verifiqué que los trozos de auyama estuvieran listos para la crema y esperé que se enfriaran.
Posteriormente, pinché la pechuga de pollo y me cercioré que estuviera lista para comer. Luego, retiré del fuego. Al cabo de unos minutos, desmenucé en tiras delgadas. Guardé el caldo de pollo.
Los pedazos de auyama fueron a la licuadora junto a una taza de caldo de pollo y los aliños. Licué hasta que obtuve una mezcla homogénea. Finalmente, agregué la mitad de las rodajas de zanahoria y algunas tiras de pollo y volví a batir.
La crema quedó con un color increíble, no solo por lo amarillo de la auyama sino que la zanahoria acentuó la tonalidad. Entonces decidí agregar el restante de la pechuga y para decorar usé el resto de las rodajas de zanahoria.
Esta receta fue un éxito, mi pequeña abeja estuvo feliz tras cada bocado. A ella le encanta el pollo y la zanahoria, así que al estar estos dos ingredientes involucrados en la crema se convirtieron en el añadido perfecto para alegrar su paladar.
✓Photos from my personal gallery, edited with Fotocollage.
✓Text translated with DeepL.
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✓Fotos de mi galería personal, editadas con Fotocollage.
✓Texto traducido con DeepL.
