En mi juventud odiaba los colores claros y para mí solo existía el negro, pero ya luego por cuestiones de trabajo tuve que usar uniformes de diferentes colores y pude notar que algunos hasta me quedan mejor que el negro y allí maduré con el tema del color en la ropa jajaja.
El rosado te queda bastante bien, te ves fresca y elegante con ese vestido, transmites tranquilidad mental y felicidad, sencillamente genial. Por cierto hermoso arte en la pared. saludos.