
Los domingos son el día que reservo para lo extraordinario escondido en lo cotidiano, el día en que me detengo, aunque sea un momento, para reconocer esas pequeñas epifanías que nos susurran que la vida está tejida con los hilos de algo que, no teniendo otro nombre, podemos llamar milagro. La semana pasada fue la pequeña gatita de mi vecina nuestra protagonista, pero hoy quiero hablarles de alguien muy especial: Tito.
Tito es un perro, no sé su raza y en su historia ese dato es lo más irrelevante. Tito es peludo, blanco como la leche y con una mirada que desarma. Pertenece a un amigo mío quien lo adoptó; me cuenta que desde el primer día fue como un terremoto de cariño en cuatro patas.

Un día, al parecer, las escaleras de su edificio se convirtieron en el escenario de una tragedia en miniatura y aconteció una lesión medular irreversible. Y esas tres palabras pueden que suenen a sentencia, a punto final. Esta lesión implicaba la disminución casi total de la movilidad de las patas traseras y una incontinencia urinaria que, para muchos, podría ser la gota que colma el vaso de la paciencia. Uno podría imaginar el desenlace: desesperanza, un animal sumido en la tristeza y una carga demasiado pesada. Pero la historia de Tito no es esa; su historia es, precisamente, el milagro que queremos celebrar.
El primer milagro tiene un nombre humano: el de mi amigo y su familia, quienes frente al diagnóstico no tuvieron dudas y sí mucho amor que se puso manos a la obra y se transformó en acción. Tito puede vivir tranquilo en su apartamento, donde es atendido como el pequeño consentido de la familia, tan orgulloso como un campeón. Tito no controla esfínteres, pero viste un pequeño pañal para perritos, y no como un estigma, sino como un traje de héroe que le permite vivir con dignidad y limpieza dentro del hogar que es su reino.

Y entonces está el otro milagro, más profundo: la capacidad de transformar la limitación en una nueva forma de normalidad, el dolor en cuidado y la vulnerabilidad en un vínculo indestructible. Mi querido amigo no ve una carga cuando cambia su pañal; ve a Tito, su Tito, que lo recibe siempre con unos ojos que brillan de gratitud y felicidad, porque para él es su ángel guardián, su salvador. Mi amigo es, sin duda, el milagro más grande en la vida de Tito.
Y la historia no termina allí, porque los milagros a menudo se multiplican; Tito ya no está solo, tiene una hermanita de adopción: Shakira, y ver a estos dos perritos juntos es contemplar la viva estampa de la ternura. Juntos, forman un dúo que encarna la pureza de un amor que no juzga, que no ve discapacidades, que solo ve al otro como su igual.

El milagro de Tito no es que pueda volver a caminar; su milagro, y el nuestro si sabemos verlo, es que nos muestra que el amor verdadero no consiste en buscar seres perfectos, sino en amar de manera perfecta a seres imperfectos.
El milagro de mi domingo tiene cuatro patas, lleva un pañal y se llama Tito, y su existencia nos recuerda que a veces los ángeles no tienen alas, sino cola, y que suelen ladrar sin parar.


Y porque ha sido una semana bella leyendo todas las experiencias de milagros en cuatro patitas, pues daré los resultados de este reto semanal, con una alegría que me desborda el pecho:
🐾La amiga @iriswrite, con su comentario y las experiencias de su gata Chita, se lleva 200 puntos Ecency.
🐾El estremecedor post de @mariperez316 acerca de la perrita Alaska merece 2 HSBI.
🐾Por su parte, esta comunidad que nos acoge, #greenzone (@hive-164923), otorgará 2 HSBI a @edward777, cuya gran sensibilidad nos habló del milagro en los gatos callejeros.

Ha sido una semana de mucha luz mientras leía sus experiencias milagrosas, y les estoy profundamente agradecida por la complicidad… ¡Hasta el próximo domingo de milagros!

🐕¡𝑮𝒓𝒂𝒄𝒊𝒂𝒔 𝒑𝒐𝒓 𝒍𝒆𝒆𝒓! 🐱
𝑺𝒊 𝒂ú𝒏 𝒏𝒐 𝒎𝒆 𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒆𝒔: 𝒔𝒐𝒚 𝒏𝒆𝒖𝒓ó𝒍𝒐𝒈𝒂 𝒚 𝒆𝒔𝒄𝒓𝒊𝒕𝒐𝒓𝒂 𝒄𝒖𝒃𝒂𝒏𝒂, 𝒎𝒂𝒅𝒓𝒆, 𝒎𝒖𝒋𝒆𝒓 𝒚 𝒔𝒐ñ𝒂𝒅𝒐𝒓𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒆𝒏𝒄𝒐𝒏𝒕𝒓ó 𝒆𝒏 𝑯𝒊𝒗𝒆 𝒖𝒏 𝒉𝒆𝒓𝒎𝒐𝒔𝒐 𝒆𝒔𝒑𝒂𝒄𝒊𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒗𝒐𝒍𝒂𝒓.
𝑬𝒍 𝒕𝒆𝒙𝒕𝒐 𝒚 𝒍𝒂𝒔 𝒊𝒎á𝒈𝒆𝒏𝒆𝒔 𝒔𝒐𝒏 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝒂𝒖𝒕𝒐𝒓í𝒂, 100% 𝒉𝒖𝒎𝒂𝒏𝒐𝒔 (𝒔𝒊𝒏 𝑰𝑨).
𝑩𝒂𝒏𝒏𝒆𝒓 𝒅𝒊𝒔𝒆ñ𝒂𝒅𝒐 𝒑𝒐𝒓 𝑳𝒖𝒎𝒊𝒊.
¿𝑻𝒆 𝒈𝒖𝒔𝒕ó 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒑𝒖𝒃𝒍𝒊𝒄𝒂𝒄𝒊ó𝒏? 𝑽𝒐𝒕𝒂, 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒂 𝒐 𝒓𝒆𝒃𝒍𝒐𝒈𝒖𝒆𝒂 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒂𝒚𝒖𝒅𝒂𝒓 𝒂 𝒅𝒆𝒔𝒑𝒍𝒆𝒈𝒂𝒓 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒔 𝒂𝒍𝒂𝒔.💛


ENGLISH VERSION

Sunday Miracles: Tito and his lesson in love on four paws || Winners

Sundays are the day I reserve for the extraordinary hidden in the ordinary, the day when I pause, if only for a moment, to recognize those small epiphanies that whisper to us that life is woven with the threads of something that, having no other name, we can call a miracle. Last week it was my neighbor's little kitten who was our protagonist, but today I want to tell you about someone very special: Tito.
Tito is a dog. I don't know his breed, and in his story, that detail is the most irrelevant. Tito is furry, white as milk, and with a disarming gaze. He belongs to a friend of mine who adopted him; he tells me that from day one, he was like an earthquake of affection on four paws.

One day, apparently, the stairs in his building became the stage for a miniature tragedy, and an irreversible spinal cord injury occurred. And those three words might sound like a sentence, like a full stop. This injury meant an almost total loss of mobility in his hind legs and urinary incontinence that, for many, could be the last straw. One could imagine the outcome: hopelessness, an animal sunk in sadness, and a burden too heavy to bear. But Tito's story is not that one; his story is, precisely, the miracle we want to celebrate.
The first miracle has a human name: that of my friend and his family, who, faced with the diagnosis, had no doubts and a lot of love that rolled up its sleeves and turned into action. Tito can live peacefully in his apartment, where he is cared for like the little spoiled one of the family, as proud as a champion. Tito cannot control his bladder, but he wears a little diaper for dogs, not as a stigma, but as a hero's suit that allows him to live with dignity and cleanliness inside the home that is his kingdom.

And then there is the other, deeper miracle: the ability to transform limitation into a new form of normality, pain into care, and vulnerability into an unbreakable bond. My dear friend doesn't see a burden when he changes his diaper; he sees Tito, his Tito, who always greets him with eyes shining with gratitude and happiness, because for him, my friend is his guardian angel, his savior. My friend is, without a doubt, the greatest miracle in Tito's life.
And the story doesn't end there, because miracles often multiply; Tito is no longer alone, he has an adopted little sister: Shakira, and seeing these two little dogs together is to behold the very picture of tenderness. Together, they form a duo that embodies the purity of a love that does not judge, that does not see disabilities, that only sees the other as its equal.

Tito's miracle is not that he can walk again; his miracle, and ours if we know how to see it, is that it shows us that true love does not consist of seeking perfect beings, but in loving imperfect beings perfectly.
The miracle of my Sunday has four paws, wears a diaper, and is named Tito, and his existence reminds us that sometimes angels don't have wings, but tails, and they usually bark non-stop.


And because it has been a beautiful week reading all the experiences of miracles on four little paws, I will now give the results of this weekly challenge, with a joy that overflows my chest:
🐾Our friend @iriswrite, with her comment and the experiences of her cat Chita, gets 200 Ecency points.
🐾The moving post by @mariperez316 about the dog Alaska deserves 2 HSBI.
🐾For its part, this community that hosts us, #greenzone (@hive-164923), will award 2 HSBI to @edward777, whose great sensitivity told us about the miracle in stray cats.

It has been a week full of light while reading your miraculous experiences, and I am deeply grateful for your companionship… Until the next Sunday of miracles.

🐕𝑻𝒉𝒂𝒏𝒌𝒔 𝒇𝒐𝒓 𝒓𝒆𝒂𝒅𝒊𝒏𝒈! 🐱
𝑰𝒇 𝒚𝒐𝒖 𝒅𝒐𝒏’𝒕 𝒌𝒏𝒐𝒘 𝒎𝒆 𝒚𝒆𝒕. 𝑰’𝒎 𝒂 𝑪𝒖𝒃𝒂𝒏 𝒏𝒆𝒖𝒓𝒐𝒍𝒐𝒈𝒊𝒔𝒕 𝒂𝒏𝒅 𝒘𝒓𝒊𝒕𝒆𝒓, 𝒂 𝒎𝒐𝒕𝒉𝒆𝒓, 𝒂 𝒘𝒐𝒎𝒂𝒏, 𝒂𝒏𝒅 𝒂 𝒅𝒓𝒆𝒂𝒎𝒆𝒓 𝒘𝒉𝒐’𝒔 𝒇𝒐𝒖𝒏𝒅 𝒊𝒏 𝑯𝒊𝒗𝒆 𝒂 𝒃𝒆𝒂𝒖𝒕𝒊𝒇𝒖𝒍 𝒔𝒑𝒂𝒄𝒆 𝒕𝒐 𝒔𝒐𝒂𝒓.
𝑨𝒍𝒍 𝒕𝒆𝒙𝒕 𝒂𝒏𝒅 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒆𝒔 𝒂𝒓𝒆 𝒎𝒚 𝒐𝒓𝒊𝒈𝒊𝒏𝒂𝒍 𝒄𝒓𝒆𝒂𝒕𝒊𝒐𝒏𝒔, 100% 𝒉𝒖𝒎𝒂𝒏-𝒎𝒂𝒅𝒆 (𝒏𝒐 𝑨𝑰).
𝑩𝒂𝒏𝒏𝒆𝒓 𝒅𝒆𝒔𝒊𝒈𝒏𝒆𝒅 𝒃𝒚 𝑳𝒖𝒎𝒊𝒊.
𝑳𝒐𝒗𝒆𝒅 𝒕𝒉𝒊𝒔 𝒑𝒐𝒔𝒕? 𝑼𝒑𝒗𝒐𝒕𝒆, 𝒄𝒐𝒎𝒎𝒆𝒏𝒕, 𝒐𝒓 𝒓𝒆𝒃𝒍𝒐𝒈 𝒕𝒐 𝒔𝒑𝒓𝒆𝒂𝒅 𝒕𝒉𝒆 𝒘𝒊𝒏𝒈𝒔 𝒐𝒇 𝒄𝒓𝒆𝒂𝒕𝒊𝒗𝒊𝒕𝒚! 💛





