Compartían unos tragos en un bar 6 asiduos amigos, se conocían desde hacía muchos años, jugaron en su adolescencia al futbol, estudiaron en la misma escuela y laboraban en la misma empresa, sus esposas eran amigas entre ellas y se reunían también, todos se respetaban y querían, hasta que esa noche una conversación lo cambio todo…
El más viejo de los seis les dijo que todos guardamos secretos y que quien estaría dispuesto a confesar uno muy íntimo, todos se rieron, ya que se conocían tanto que podían con confianza hablar:
El primero dijo:
-A mí no me gusta bañarme.
Todos rieron: - Ya lo sabemos por eso eres el apestoso del grupo.
El segundo dijo:
-Yo soy estéril por ello no tengo hijos.
Todos rieron y diciendo: - Pensamos que eras homosexual.
El tercero dijo:
-Yo estoy cansado de mi rutina laboral.
Todos rieron ya que todos lo estaban.
El cuarto dijo:
-Mi padre golpeo a mi madre delante de mí una vez.
Todos rieron pues él padre del cuarto era un alcohólico.
El quinto dijo:
-Tengo dudas de ser el padre de mi primer hijo.
Todos rieron: - Tienes 5 ya no vale dudar.
El sexto que era el viejo dijo:
-Tengo meses que no tengo sexo con mi mujer.
Todos rieron y dijeron: - Será que estas muy viejo.
-Aun cumplo mis funciones pero…
En ese preciso momento se inició una pelea en una mesa vecina y decidieron pagar la cuenta e irse para no involucrarse. Cada uno tenía su vehículo propio.
Con el transcurrir de los días los amigos del viejo comentaban a espaldas de él, lo joven que aún era su mujer y las buenas curvas que poseía, así se comenzó a fracturar la unión de aquel grupo. Un día falto al trabajo el apestoso, cosa muy extraña en él, reporto no sentirse bien.
El viejo llego a casa y comento a su mujer:
-Hoy apestoso no fue a trabajar.
-Si lo sé hoy estuvo por aquí.
-¿Y a que vino?
-A buscar lo que tú y yo sabemos.
-Era de esperarse.
Al siguiente día laboral el apestoso comento a uno de los amigos que había estado con la mujer del viejo y que era una fiera en la cama, al siguiente día falto ese amigo.
-Hoy falto…
-Si lo sé hoy vino por aquí también y no es homosexual.
-Si ya lo había confesado.
Al siguiente día laboral el grupo de amigos se enteró de lo fogosa que era la esposa del viejo, así fueron faltando los otros, y se turnaban para pedir permisos y el viejo los trataba con tranquilidad, en los días de compartir en el bar los chistes giraban en torno a una mujer que era muy excitante y todos reían, incluyendo al viejo…
Unos dos meses después el viejo sugiere contar otro secreto íntimo y así comenzó el primero:
-Descubrí que no huelo tan mal pues he estado con otra.
Todos rieron diciendo: - Porque te has bañado últimamente.
El segundo dijo:
-Conocí una mujer que es capaz de hacerme papá así yo sea estéril.
Todos rieron: - Debe ser muy buena en la cama.
El tercero dijo:
-Yo he renovado mis energías para seguir trabajando.
Todos rieron diciendo: - ya era hora.
El cuarto dijo:
-La mujer que conocí borro mi memoria.
Todos rieron: - te reiniciaron.
El quinto dijo:
-Ya acepte a mi hijo total otros han pasado lo mismo.
Todos rieron: - Habrá un venado entre nosotros.
El viejo dijo:
-Mi esposa tiene SIDA por ello no le he hecho el amor en mucho tiempo.
Y nadie se rio, un silencio sepulcral se adueñó de ese instante.
Six close friends were sharing drinks in a bar. They had known each other for many years, played soccer together as teenagers, studied at the same school, and worked at the same company. Their wives were friends and would also get together. They all respected and loved each other, until that night when a conversation changed everything...
The oldest of the six told them that we all keep secrets and asked who would be willing to confess a very intimate one. They all laughed, since they knew each other so well that they could talk confidently.
The first one said:
“I don't like to take baths.”
They all laughed: “We know that's why you're the stinky one in the group.”
The second one said:
“I'm sterile, so I don't have any children.”
Everyone laughed and said: “We thought you were gay.”
The third one said:
“I'm tired of my work routine.”
Everyone laughed because they all were.
The fourth one said:
“My father hit my mother in front of me once.”
Everyone laughed because the fourth one's father was an alcoholic.
The fifth said:
“I have doubts about being the father of my first child.”
Everyone laughed: “You have five, there's no point in doubting.”
The sixth, who was the oldest, said:
“I haven't had sex with my wife in months.”
Everyone laughed and said: “Maybe you're too old.”
“I still perform my duties, but...”
At that precise moment, a fight broke out at a neighboring table, and they decided to pay the bill and leave so as not to get involved. Each of them had their own vehicle.
As the days went by, the old man's friends commented behind his back on how young his wife still was and how good her figure was, and so the unity of that group began to fracture. One day, the stinky one missed work, which was very strange for him, and reported that he was not feeling well.
The old man came home and said to his wife:
“That stinky guy didn't go to work today.”
“I know, he was here today.”
“And what did he come for?”
“To look for what you and I know.”
“That was to be expected.”
The next working day, the stinker told one of his friends that he had been with the old man's wife and that she was a wildcat in bed. The next day, that friend was absent.
“He's absent today...”
“I know, he came by here today too, and he's not gay.”
“He already confessed that.”
The next working day, the group of friends found out how passionate the old man's wife was, so the others started missing work too, and they took turns asking for time off, and the old man treated them calmly. On the days they shared stories at the bar, the jokes revolved around a woman who was very exciting, and everyone laughed, including the old man...
About two months later, the old man suggested telling another intimate secret, and so the first one began:
-I discovered that I don't smell so bad because I've been with someone else.
Everyone laughed and said: - Because you've been bathing lately.
The second one said:
-I met a woman who can make me a father even though I'm sterile.
Everyone laughed: - She must be very good in bed.
The third said:
“I've renewed my energy to keep working.”
Everyone laughed, saying: “It's about time.”
The fourth said:
“The woman I met erased my memory.”
Everyone laughed: “They reset you.”
The fifth said:
“I've accepted my son completely; others have gone through the same thing.”
Everyone laughed: “There must be a deer among us.”
The old man said:
“My wife has AIDS, so I haven't made love to her in a long time.”
And no one laughed. A deathly silence took over that moment.
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