Estoy de acuerdo contigo, la abundancia está relacionada con el placer de ser que y quienes somos, una relación que muchas veces no es visible a primera vista, pero que la vida se empeña en demostrarnos una y otra vez.
A veces me hallo recomendando paz y tranquilidad a los que me rodean incluso si yo mismo estoy molesto. El quid de la cuestión radica en que muchas veces nuestra mentalidad es lo único que podemos controlar, a la vez que se trata de algo que define el resultado de todo cuanto emprendemos.
Quien mira el mundo a través de la amargura y el resentimiento obtiene exactamente eso porque eso es lo que ve y aquello con lo que resuena. Por eso es tan importante aprender, cómo decía mi abuela, a ponerle amor a las cosas.
Por cierto, muchas gracias por la delegación, no había revisado las notificaciones pero ví que mi voto era sospechosamente un poco más elevado. Me alegra enormemente cuando lo que escribo encuentra eco en los demás.