Hola Emilio, no había escuchado mencionar a la Mesa de Esjunaque, que bueno poder conocer un poco más de nuestra geografía a través de este hermoso post que nos regalas. Estoy maravillada con las orquídeas de Marina, Dios bendiga sus manos y su trabajo para cultivarlas, aun cuando el clima se presta, se necesita dedicación y conocimientos, como afirmas.
Recuerdo que al final de mi bachillerato me fui a vivir al Táchira, y la residencia era una casa al estilo colonial, con muchas habitaciones alrededor de un salón amplio y descubierto en los bordes del techo. En el centro, la señora tenía varios ambientes con juegos de sala, y uno de comedor muy grande justo enfrente de la cocina. Allí tenía una gran variedad de plantas bellísimas, entre éstas había algunas orquídeas.
Estoy impactada con la belleza de esta variedad que nos muestras, definitivamente han recibido dedicación, cuidados y amor. Nunca he podido cultivar una orquídea, no es fácil en un clima tan caluroso, el cuidado debe ser muy grande, y no conozco mucho de su cultivo, pero me encantaría tenerlas. Tengo una amiguita que vive en un lugar repleto de vegetación, y ha logrado cultivar algunas, así como dices, con dedicación, pero su esposo es criado en el campo y se conoce el abecedario de los cultivos, gracias a él ha logrado tener estas lindas especies en su casa. En algún momento la visito y les dedico un post a sus orquídeas.
Muchas gracias por mostrarnos esta interesante información, me encantó leerte. Feliz domingo!!